Palabras que cimentan la historia de un medio
Jesús Jiménez, Manuel Díaz
Carlos Herrera, el famoso locutor de Onda Cero, dice que la radio no es solo contar la vida de la gente, sino sobre todo escuchar la vida de los demás. Pues bien, tras una mañana de niebla y más de 200 kilómetros recorridos llegamos a Ponferrada para visitar el Museo de la Radio.
Varias salas nos aguardaban para disfrutar de un museo que tiene como emblema a su paisano, Luis del Olmo. Allá por el año 2003, concretamente el 22 de marzo, el presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera inauguraba este museo que en el pasado había sido construido por Manuel Francisco García de las Llanas, regidor perpetuo de la Villa de Ponferrada, Caballero de la Orden de Alcántara y Capitán del Regimiento de Milicias de León.
Nada más comenzar la visita por el museo nos encontramos con una columna blanca, en la que pudimos escuchar en cada uno de ellos diferentes melodías radiofónicas del pasado.
Más tarde nos explicaron cómo funcionaba la radio de Galena, que era un aparato receptor que constaba de un colector, un condensador, un aditivo y un delator de galena, mineral del que tomaban del nombre. Además podían fabricarse en casa, y comienzan a aparecer alrededor de 1925. Su radio de acción era de apenas 10 kilómetros y estaban fabricados por Philips, Bell o Telefunken.
Mediante diversos paneles nos mostraron los orígenes de la radio, las bases de esta se le atribuyen al escocés James Clerk Maxwell, aunque el italiano Marconi fuese capaz de coordinar las técnicas vigentes y realizar las primeras experiencias radiofónicas.
En esta misma sala pudimos ver fotografías históricas de la radio: Andrés Aberasturi entrevistando al presidente Adolfo Suarez, a unos jovencísimos Andrés Caparrós y Luis del Olmo e incluso los comienzos de Iñaki Gabilondo en Radio Sevilla.
Un rinconcito de este museo también está dedicado a Radio Barcelona, que apenas hace un mes cumplió un centenar de años. Sus primeros estudios se ubicaron en los pinares del Tibidabo. En ese mismo año ya eran cuatros las grandes emisoras españolas: En Madrid, Radio Ibérica y Radio España; en Barcelona, Radio Barcelona y en Sevilla; Radio Club Sevillano.
Otro elemento importante, y que desde hace años es indispensable en la radio es la publicidad, que ya en los años 30 contaba con personajes reales que eran utilizados para legitimar el producto. Es el caso del café “La estrella” con el diputado republicano Pérez Madrigal, el alcalde de Madrid Pedro Rico o el boxeador Paulino Uzcudum.
Mucho han cambiado las emisoras generalistas desde los años 40 hasta la actualidad. Radio Nacional en el año 1941 abría con un programa religioso, seguido de la hora agrícola y ganadera e incluso dedicaban más de una hora diaria a realizar crónicas teatrales. La programación de la época es impensable en la actualidad. 10 años después, en el 1952 la parrilla de programación había variado notablemente: las grandes novedades eran el consultorio para la mujer, de una hora de duración, y una sección dedicada a la ópera.
No podía faltar un reconocimiento a Luis del Olmo. El ponferradino dedicó parte de su trayectoria a dirigir el programa “Protagonistas”, en el que conjugaba el entretenimiento con la información y se basaba mucho en el género de la entrevista. El monarca Juan Carlos I hablaba así sobre el programa: “El éxito principal del programa Protagonistas radica en que Luis del Olmo ha acertado a evolucionar con su tiempo, buscando con imaginación nuevas formulas además de promover con entusiasmo causas nobles”
La trayectoria de Luis del Olmo es extensa, recibiendo premios como: Premio Ondas en el 1971, en 2002 su entrevista a Antonio Gaudí mereció una Mención especial del Jurado de los Premios Ondas, recibió el Micrófono de Oro en el 2003 y el 26 de enero de 2007 fue investido Doctor Honoris Causa por la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid.
En el Museo de la Radio de Ponferrada tienen una colección de aparatos radiofónicos inmensa, donde el visitante puede conocer la evolución técnica de estos, desde los primeros de galena hasta los transistores de la década de los sesenta y setenta o la radio que conocemos hoy.
Dejamos Ponferrada para volver a nuestro origen. La visita fue muy provechosa, recomendamos totalmente su visita a todos aquellos amantes de la radio. Descubrirán muchas cosas, seguro.
“El futuro es apasionante, las nuevas tecnología permiten escuchar miles de emisoras con una nitidez asombrosa” Luis del Olmo